La humanidad enfrenta un ataque letal de la naturaleza que amenaza a la especie. El virus, una molécula química invisible que se reproduce a gran velocidad por miles de millones, cubre el planeta. A diferencia de otros no da síntomas durante un buen tiempo, mientras contagia cuerpos a su alcance. 

Las pandemias recientes causaron mucho daño como la gripe porcina, originada en grandes criaderos de Estados Unidos, que finalmente desapareció. La siguiente provino de camellos del Medio Oriente, muy limitada en la actualidad . En todos los casos pasa de animales a personas.

En China al darse cuenta respondieron con rapidez, al aplicar medidas de confinamiento. Políticas igualmente eficaces, con gran inversión de recursos tecnológicos funcionan en Corea o Japón. Antes del tercer mes los chinos empiezan a revertir la infección en Hubei. Durante un lapso bastante menor, el número de muertos en Europa los supera.

Políticas diferentes para entender el problema limitaron el control. Cuando lograron reaccionar, ya el patógeno se había disparado. Pese a sus avanzados sistemas de salud pública, universales y gratuitos, afrontan una dramática explosión de casos mortales .

No obstante las orientaciones de la Organización Mundial de la Salud a partir del brote asiático, otros importantes países adoptan comportamientos equivocados. Boris Johnson, primer ministro británico, calculaba el costo beneficio de 20 mil muertos, con la recomendación de que se preparen para perder parientes veteranos. Luego le corrigieron la plana por un posible cuarto de millón de fallecidos. El prestigioso Imperial College elevó la proyección a más de un millón. Trump pretende que los afectados compren su máquina de ventilación.

El presidente mexicano anda dedicado a repartir besos y abrazos, quizás protegido por la virgen de Guadalupe. Jair Bolsonaro feliz porque solo sus ministros cogieron el germen. Los ayatolas iraníes no cierran las mezquitas porque creen que es una conspiración contra ellos mientras entierran a las víctimas en fosas comunes.

Iván Duque de Colombia, no quiere nada fuerte para no “estresar a los empresarios”.

El resto de América Latina responde mejor, con el gobierno peruano con medidas certeras de aislamiento general. sin demasiados recursos. El continente registra un ataque viral mortal quinientos años atrás, cuando la viruela y la gripe portados por los conquistadores, arrasaron con más del 80% de la población de dos grandes civilizaciones..

La crisis sanitaria en el planeta fulmina el modelo individualista anti Estado del capitalismo neoliberal. En la gran recesión del 2008 las potencias gastaron miles de millones de dólares para salvar a la banca.

Los reducidores del Estado en el Perú debilitaron los servicios públicos. El desastre revela el fracaso del modelo del lucro, que trae desigualdad, corrupción, informalidad masiva y mugre.

La especie humana evoluciona y sobrevive porque coopera. El homo sapiens es pues un animal social, no un troglodita acumulador. Con inteligencia, cooperación y solidaridad universales, derrotaremos a la enfermedad del mundo.