#ElPerúQueQueremos

https://elmontonero.pe

EL APRA DEL CENTENARIO

Agustín Haya de la Torre

Publicado: 2019-05-08

El 7 de mayo de 1924 en el antiguo colegio jesuita de San Ildefonso, en Ciudad de México, Víctor Raúl Haya de la Torre iniciaba la andadura de la Alianza Popular Revolucionaria Americana. Deportado por Augusto B. Leguía, llegó durante el período del presidente Álvaro Obregón, cuando la revolución se institucionalizaba. 

El clima cultural y político resultaba propicio para emprender una idea de gran envergadura, Fundar una internacional indoamericana de fuerzas democráticas anti oligárquicas, podía convocar la inquietud de las nuevas generaciones.

De México partió hacia la Rusia soviética, enviado por la Federación Obrera de Lima. Pudo contrastar dos revoluciones en un testimonio vivido. Tratar con sus gentes, conversar con sus líderes. El periplo lo llevó a Berlín, a Suiza, luego a la vida académica en Oxford y la London School.

Su interpretación de Marx lo distanció de la Internacional Comunista. En 1930 se fundó la sección peruana de la APRA, que lo lanzó a la presidencia.

Durante largos años enfrentó dictaduras y conatos de guerra civil. La represión fue brutal pero el partido resistió hasta convertirse en una fuerza decisiva en la política peruana.

Sus banderas de democracia, sufragio universal y justicia social caracterizaron su rumbo, No alcanzó la presidencia en 1962 ni al año siguiente. Soportó la larga dictadura militar desde 1968 hasta que la salida constituyente de 1979 lo consagró como presidente de la Asamblea.

Por seis décadas forjó un liderazgo de gran calado. Era la época en que los políticos de izquierda no solo actuaban, sino que pensaban y escribían. Luis Alberto Sánchez era un referente intelectual. Manuel Seoane avizoraba la revolución mundial, mientras Luis Felipe de las Casas diseñaba planes de gobierno y el fino y elegante Andrés Townsend abordaba a los forjadores de la historia. Desde Ciro Alegría a los poetas del pueblo, de Antenor Orrego, Macedonio o Alcides Spelucín a Manuel Scorza, por décadas militó con lo mejor de la intelectualidad nacional.

Haya culminó su camino con la Constitución de 1979, que propuso organizar el Estado sobre la base de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

Poco antes, en 1976, convocado por Willy Brandt, concurrió a la primera reunión latinoamericana de la Internacional Socialista, donde le encargaron el discurso de cierre.

En el último capítulo de su vida dejó de lado ciertas concesiones para retomar con lucidez la apuesta por el Perú con justicia social del siglo XXI. Esa es su herencia, hacer del programa de la democracia social la razón de ser del partido.

Un legado limpio, incorruptible, que jamás medró del dinero público. La persecución o la cárcel, que lo “enmarroquen” o lo amenacen con el pelotón de fusilamiento, , nunca lo acobardaron. Eran gajes del oficio.


Escrito por

Agustín Haya

Sociólogo. Facebook: https://www.facebook.com/agustin.haya Twitter: @agustinhaya Publicaciones: https://goo.gl/gFdCC7


Publicado en

Agustín Haya

Blog de ideas democráticas y sociales.